1. Lente
Lo mejor para conducir es que adquieras unas gafas de sol con cristales polarizados. Este tipo de cristales permite reducir los deslumbramientos, y dispone de mejores filtros ultravioleta. No sólamente este aspecto es importante sino que si también consigues que el tintado del cristal sea gris, esto permitirá que el color de tu entorno no contraste tanto entre la visión con gafas y sin gafas, pudiendo así distinguir mejor el relive. No obstante si no quieres gastarte una gran cantidad económica en tus gafas no pienses en esta opción ya que las gafas polarizadas pueden llegar a aumentar en 50 euros las que no lo son.
Si eres de los que suele romper las gafas con frecuencia o no pones demasiada atención en su cuidado, esta opción es la ideal para ti. Las gafas con lentes orgánicas son mucho más resistentes que las de cristal, por lo que serán mucho más seguras y ligeras.
2. Calidad
Algo fundamental que debes tener en cuenta es que el modelo que selecciones lleve el distintivo de las sigles CE. Esto no es otra cosa que una garantía de que las gafas que has comprado han superado los controles de calidad de la Unión Europea, y que por lo tanto sí protegerán tus ojos contra el sol.
Comprueba también que están acompañadas tanto de instruccciones como de un certificado que refleje el número de filtro contra el sol.
3. Montura
Para estar más atento a la conducción es vital que la montura de tus gafas sea ergonómica y ligera, ya que así evitarás estar recolocándotelas continuamente. Por otro lado intenta fijarte también en que la montura cubre los laterales de los ojos y del cráneo, ya que así podrás evitar cualquier reflejo lateral.
4. Precio
Es muy importante que partas de la base de que las gafas de sol para conducir no son baratas, principalmente por la gran cantidad de materiales con las que están hechas y que aseguran tu correcta visión de la carretera. Si compras unas gafas por menos de 30 euros es muy problable que no sean eficientes contra rayos ultravioleta así como que tampoco tengan cristales polarizados.
Ten en cuenta que si las gafas son muy baratas puede ser que se trate de una falsificación o una de las tantas imitaciones de marcas que hay en el mercado. Si compras este tipo de gafas puedes provocar numerosos daños a tus ojos, principalmente porque no impiden la llegada de los rayos ultravioleta y por tanto estarás demasiado expuesto al sol, llegando a producirte desde úlceras hasta en los casos más extremos ceguera progresiva.
fuente:IDEAL.ES